viernes, diciembre 31, 2004

Gudiño, Aguirre y la Tremenda Corte

La polémica suscitada por la actuación de la Comisión de Receso de la Suprema Corte (que incluye un manejo inadecuado de plazos, suspensiones de actos y nombramiento de ministros ponentes) es sólo el último eslabón de una cadena de desatinos judiciales en el máximo tribunal del país.

Resulta claro que si la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación sólo faculta que la Comisión de Receso resuelva cuestiones administrativas urgentes, sus miembros (los ministros Salvador Aguirre y Jesús Gudiño) se exceden en sus atribuciones al admitir y dar trámite a la controversia constitucional que promovió el Poder Ejecutivo contra la Cámara de Diputados, que no es un simple asunto administrativo. No tiene mucho caso profundizar en ese tema, que es únicamente una de las múltiples manifestaciones de una estructura judicial que deja mucho que desear.

Muchos vimos con escepticismo la reforma constitucional promovida por Ernesto Zedillo que adelgazó a la Suprema Corte y le estableció un órgano administrativo con miembros externos al Poder Judicial. Algo que fue promovido como una reforma de Estado parecía una purga que privilegiaría a los integrantes del nuevo tribunal y que redundaría en una lealtad nociva de los jueces a la presidencia. No tardó en evidenciarse que las desconfianzas eran fundadas, ya que el 7 de octubre de 1998 (durante la presidencia del ministro Vicente Aguinaco) los ministros permitieron la capitalización de intereses (en franca contravención a lo dispuesto por las ley mercantil) que tuvo por víctimas a miles de deudores. Después de ese lamentable error judicial se continuaron resolviendo importantes asuntos con ponderaciones poco pertinentes, la situación no mejoró sustancialmente durante la presidencia del ministro Góngora y ha empeorado gravemente desde que Mariano Azuela encabeza el máximo tribunal del país, quien se ha inmiscuido en escándalos por sus reuniones secretas con el presidente Fox en torno a los procesos que involucran a Andrés Manuel López Obrador.

El caso del anatocismo (cobro de intereses sobre intereses) es emblemático de la forma como se ordenaba a los ministros que resolvieran los asuntos de interés para la presidencia. Medios nacionales (en específico Milenio Semanal y La Jornada) reportaron que días antes de la resolución, el presidente Zedillo tuvo una comida con los once ministros de la Corte y “les expuso la importancia para el país de contar con un sistema bancario sólido y el riesgo de que una avalancha de demandas por parte de los deudores hiciera tambalearse a la banca”. A pesar de que el proyecto original de sentencia formulado por el entonces ministro Juventino Castro era a favor de los deudores, la Corte favoreció a los bancos. Sólo votaron en contra del sentido del pleno los ministros Juan Silva Meza, Juventino Castro y Humberto Román Palacios. Apenas 24 días después de la resolución, los once ministros de ese entonces aceptaron (en bloque y sin escrito de por medio) una comida privada que les ofreció el gobernador del Banco de México, Guillermo Ortiz Martínez, “en reconocimiento por el fallo que tranquilizó al sistema financiero nacional”.

Ciertamente la Corte anterior a la reforma de 1994-1995 no era un dechado de virtudes. Durante los noventa se criticó con dureza un criterio judicial que sostenía que la inexistencia y la nulidad absoluta de los actos jurídicos eran lo mismo, que respondían únicamente a cuestiones teóricas, planteamiento de la Corte que es absurdo ¿Si un ministro no sirve para nada eso implica que no existe? ¿Verdad que no? Incluso mi ilustre maestro Ernesto Gutiérrez y González dedicó una parte de su libro Derecho de las Obligaciones para reprochar la poca pericia jurídica de esos jueces federales. En sus charlas de sobremesa, Don Ernesto no los bajaba de burros e ignorantes. A pesar de que el Poder Judicial ha modificado su opinión en materia de nulidades, todavía se encuentran vigentes otros criterios que son verdaderamente vergonzosos para el mantenimiento de la equidad que todo Estado de Derecho demanda.

La sapiencia jurídica tampoco es una virtud de los ministros actuales. A pesar de que la Constitución no considera como un gobernador al Jefe de Gobierno del Distrito Federal, la Corte actual le concedió el derecho a solicitar investigaciones como si fuera un mandatario estatal, cuando su naturaleza jurídica es más cercana a la de un alcalde. Habrá quien considere que esa decisión no fue dictada por torpeza, sino por cálculo político. Resulta difícil establecer que supuesto es más grave, la ignorancia y la deshonestidad son dos efectivos venenos que matan a la justicia.

Hace una semana escribíamos sobre la astucia del juez Marshall para evitar una crisis política, desafortunadamente los ministros mexicanos no supieron seguir su ejemplo y se cierne la sombra del juicio político contra los ministros Gudiño y Aguirre, integrantes de un tribunal que supuestamente había sido depurado. Sin embargo, se puede rescatar algo benéfico de este escándalo, ya que las vergüenzas de la Suprema Corte son evidencia de que urge una nueva reforma judicial. Este es el destino de esa Tremenda Corte.

viernes, diciembre 24, 2004

Fox y el fantasma de Marbury

En algunas ocasiones una sentencia impacta más por los temas secundarios que toca que por el asunto principal de la controversia. La historia marca ejemplos que evidencian ese poder de las nimiedades y que en virtud de la impugnación foxista del presupuesto vale la pena recordar.

En Estados Unidos los redactores de la norma fundamental de Filadelfia no incorporaron el control judicial de la constitucionalidad de las leyes, ese sistema fue producto de las reflexiones del presidente de la Corte Suprema, John Marshall, en el famoso caso Marbury v.s. Madison, resuelto en 1803. Sin embargo, el juicio donde se trató el punto versaba sobre una cuestión que en principio no justificaba las consideraciones de Marshall para asumir como necesario que la Corte declarara no aplicables las leyes que contravinieran a la Constitución.

Al igual que en el México actual, a principios del siglo XIX Estados Unidos había cambiado de partido en la presidencia y no se hacían esperar los ajustes de cuentas políticas. Hasta los comicios presidenciales de 1800, el Partido Federalista ocupaba el Poder Ejecutivo del vecino país del norte, situación que cambió con el triunfo electoral de Thomas Jefferson. El mandatario saliente, John Adams, se había preocupado por la protección de sus allegados políticos al otorgarles puestos en los que la inamovilidad les garantizara que el nuevo gobierno no los podía destituir discrecionalmente (en eso los tiempos han cambiado, ahora a los leales colaboradores se les dan bonos de fin de periodo, pero eso es materia de otra columna). Para lograr que su repartición de trabajos prosperara, el Congreso (obviamente controlado por su partido) creó varios puestos judiciales, entre los que destacan (para efectos de lo que aquí se platica) 42 cargos para jueces de paz en el Distrito de Columbia. El presidente Adams continuó con la confección del pastel que horneaba para sus amigos, se propusieron a las personas que fungirían como jueces, el Senado los ratificó, el presidente firmó los nombramientos y se le remitieron al secretario de Estado para que los sellara y enviara. Como en esa época no había computadoras ni impresoras láser, el funcionario tuvo que realizar ese proceso a mano y, con la urgencia de entregar el despacho al secretario entrante (quien era de otro partido), cometió el muy humano error de olvidar el envío de su nombramiento a cuatro nuevos jueces de paz, por lo que el nuevo titular del despacho procedió a guardarlos en su cajón para nunca entregarlos: El secretario entrante se llamaba James Madison, uno de los afectados por el error era William Marbury y el subsecretario saliente que había firmado los nombramientos no era otro sino John Marshall, quien había sido nombrado Presidente de la Corte Suprema.

Marbury no se quedó conforme con la actitud del gobierno y presentó una demanda para que la Corte le ordenara al secretario Madison que le entregara su codiciado nombramiento de juez. El problema político para la Corte era mayúsculo, Marshall había firmado los nombramientos en su anterior cargo y ahora tenía que juzgar el asunto. Si la Corte Suprema le ordenaba al Ejecutivo que le diera a Marbury su nombramiento, se atenía a que el nuevo gobierno acusara al Poder Judicial de parcialidad e iniciara una reforma constitucional alegando que el Partido Federalista pretendía perpetuarse en el poder a través de las labores de la judicatura. Por otro lado, negarle a Marbury la notificación de su nombramiento implicaba otorgarle a los jeffersonianos la potestad de burlarse de la ley y así dominar, de facto, al Poder Judicial. El juicio tenía la complicación adicional de que la Corte no contaba con medios para obligar al Ejecutivo a que cumpliera la orden que emitía y Madison podría haber continuado en su posición de negar la entrega del nombramiento a Marbury.

Marshall resolvió el problema con una jugada astuta, le negó a Marbury la orden de entrega al declarar que la Corte Suprema no tenía facultades para tratar el asunto, ya que la ley que le otorgaba atribuciones para conocer de ese juicio ampliaba la competencia que originalmente le definía la Constitución, lo que era inconstitucional. Jefferson se quedó satisfecho con la decisión de la Corte, sin darse cuenta de que Marshall había metido por la puerta trasera la facultad judicial de revisar la constitucionalidad de las acciones de las ramas legislativa y ejecutiva del gobierno. Para lograr ese poder, el presidente de la Corte Suprema sacrificó un peón, a Marbury, que no obtuvo del máximo tribunal lo que pretendía.

Ahora que el presidente Fox se empecina en otorgarse una facultad que no tiene (y de paso alegar los supuestos límites intocables de su función administrativa) no estaría de más que recordara la suerte de Marbury y que ese fantasma no le pegara un susto en la noche: Quizá le esté abriendo las puertas a la Corte para que defina el fondo del presupuesto cuando Congreso y Ejecutivo no se pongan de acuerdo.

viernes, diciembre 17, 2004

El país de los enanos

Las palabras son enanos, los ejemplos son gigantes.
Proverbio suizo

El vicecoordinador del PAN en la Cámara de Diputados federal, Germán Martínez Cázares, calificó de enanos a los legisladores del bloque opositor. ¿Cuál fue la causa del exabrupto? El rechazo y devolución de las observaciones presidenciales al Presupuesto de Egresos para 2005, decisión parlamentaria respaldada por 332 votos. Más allá de la comicidad involuntaria del berrinche del diputado Martínez, resulta importante cuestionar los argumentos que utilizó el legislador blanquiazul para descalificar que al Presidente no se le hayan reconocido facultades para vetar el Presupuesto de Egresos.

Martínez Cázares lanzó una crítica insultante a sus adversarios: “No distinguen, diputados enanos, entre la institución presidencial y el gobierno de Fox; no distinguen, diputados liliputienses, hacia dónde queremos consolidar nuestra democracia”. ¿Consentir que el presidente pueda vetar el Presupuesto permite consolidar la democracia? Obviamente no, la democracia se basa en el control del poder, difícilmente puede ser considerado demócrata quien espera que las propuestas presidenciales no sean revisadas y controladas. Los diputados del PRI y PRD le gritaron "Arriba Cantiflas" a Martínez, quien primero afirmó que al presidente se le puede derrotar en el tema presupuestal sin odios, rencores o miopías… y después insultó con rabia a sus adversarios. Más que como “Cantiflas”, Germán Martínez procedió como “La Chimoltrufia”, ya que “como dice una cosa, dice otra”.

La Presidencia de la República espera que una controversia constitucional defina que el Poder Ejecutivo tiene facultades de veto en materia presupuestal, tema en el que la Corte Suprema tiene un interés superior al de un mero árbitro imparcial: El Presidente de la Suprema Corte, Mariano Azuela Güitrón, el pasado miércoles rindió su informe de labores y explicó que las reducciones presupuestales para 2005 afectarán a los tribunales y juzgados, la disminución de 5 mil millones de pesos podría provocar que el rezago judicial aumente al nivel de tiempos ya idos y aparentemente superados. Azuela volvió a recordar la necesidad de introducir una reforma constitucional que garantice un mínimo presupuestal al Poder Judicial de la Federación. Obviamente, para la Corte reviste una importancia primordial la definición de la controversia constitucional entre Cámara de Diputados y Presidencia de la República.

Un presidente con operación política eficaz propondría que la Corte le otorgara facultades de veto a cambio de un generoso reajuste presupuestal a favor del Poder Judicial de la Federación. Por otro lado, 330 votos del bloque opositor equivalen a las dos terceras partes de los integrantes de la Cámara de Diputados, requeridas por el artículo 135 de la Ley Fundamental para comenzar una reforma constitucional que asigne al Poder Judicial un monto del presupuesto que garantice mínimos de operación a los tribunales. Resulta ingenuo pretender que el máximo tribunal del país no considerará que una decisión a favor de Fox puede sacarlo de su problemática financiera. ¿Consolida la democracia que el Poder Judicial sea sometido a la tentación de no controlar el poder público?

En parte tiene razón Martínez Cázares, los diputados son enanos, pero no por darle un manazo a un presidente que sólo de dientes para afuera acepta que él sólo propone y que es el Congreso quien dispone. El enanismo alcanza a toda la clase política mexicana, a los partidos, a la administración pública, a las policías, como lo revela un estudio de Transparencia Internacional (TI) que pone a México entre los ocho países más corruptos del mundo y como segundo lugar en corrupción policíaca.

El organismo no gubernamental basó su “Barómetro Global sobre la Corrupción” en las opiniones de 50 mil personas encuestadas por Gallup y concluyó que las instituciones más corruptas (en seis de cada diez países) son los partidos políticos, las cámaras legislativas, la policía y el Poder Judicial. Mientras el campeón mundial en corrupción (Ecuador) tiene una calificación de 4.9 puntos de 5 posibles, México alcanzó 4.5 puntos, al igual que Bolivia, Brasil y Costa Rica. Cuando Martínez Cázares les dice enanos a los diputados opositores en realidad le grita a su imagen en el espejo (que sólo alcanza subiéndose a un banquito): Él pertenece a un partido político mexicano, es miembro de un órgano legislativo y defiende al Poder Ejecutivo, todos ellos vistos como muy corruptos por la opinión pública. El PAN no es un partido político de Holanda, donde la corrupción es calificada con 2.8 puntos, es un instituto político de México, país donde los enanos gobiernan, violan derechos humanos, usan la ley como papel desechable e incluso pretenden negociar un fallo constitucional.

Los suizos sostienen que la grandeza está en las acciones, no en las palabras. Ojala que nuestros políticos dejen de abusar de la palabra, conducta que los vuelve enanos. En un país afectado por la delincuencia, el comercio informal, el desempleo y el abuso de poder, lo que se necesitan son estadistas, gigantes de la política, no enanillos gritones que estorben al desarrollo nacional. La democracia se consolidará en el momento en que el poder público se encuentre acotado, controlado y limitado, no cuando al presidente se le cumplan todos sus deseos. Al parecer algunos políticos están muy chiquitos para ocupar cargos públicos, esperemos que este no sea el caso de los ministros de la Corte Suprema, quienes por antonomasia deben ser grandes.

jueves, diciembre 16, 2004

Falsas amistades

Aristóteles sostenía que la amistad perfecta es la de los buenos y de aquellos que se asemejan por la virtud. Ellos se desean mutuamente el bien en el mismo sentido. Es decir, son defectuosas las amistades con personas de moralidad distinta, ya no se diga con alguien que tiene doble moral, afirmación que se confirma por lo que dice el Dalai Lama: La amistad sólo podía tener lugar a través del desarrollo del respeto mutuo y dentro de un espíritu de sinceridad. Montesquieu, como jurista que fue, definía a la amistad como un contrato por el cual nos obligamos a hacer pequeños favores a los demás para que los demás nos los hagan grandes, lo que marca la importancia del trato recíproco y solidario como principio rector de la amistad.
A pesar de la sabiduría de esos tres pensadores, la expresión que más me agrada respecto a la amistad es del escritor vasco Pío Baroja: Sólo los tontos tienen muchas amistades. El mayor número de amigos marca el grado máximo en el dinamómetro de la estupidez. La falsa amistad es como una herida purulenta, sobre todo cuando una de las partes brinda autenticidad en su trato, paradójicamente suele ser el falso amigo el que más celebra el término del vínculo cuando queda al descubierto la suciedad de sus intenciones.

Esta reflexión no tiene desenlace, al igual que el autor de El mayorazgo de Labraz, lo prudente es que dejemos las conclusiones para los idiotas.

viernes, diciembre 10, 2004

Por insubordinado

Quien ha sufrido tus imposiciones, te conoce.
William Blake
Santiago Creel dice que a Marcelo Ebrard lo destituyeron por insubordinado, no por las notorias muestras de incompetencia que dio en los últimos tres años. Más de 20 linchamientos en el Distrito Federal no fueron motivo suficiente para que a Ebrard le dieran las gracias, sino que no reconociera la autoridad de su jefe, el presidente de todos los mexicanos y mexicanas, lo que habla mal de las prioridades del gobierno federal: Un líder inteligente se preocuparía más por tener personal capaz que por contar con subordinados obedientes pero dotados de una incompetencia supina.

Lo cierto es que a las víctimas de la inseguridad pública poco les importa si Ebrard obedecía a Fox o si lo tiraba a Lucas, la mayoría de los ciudadanos no lamentan el relevo del Secretario de Seguridad Pública del DF porque no hacía su trabajo bien. Si el joven Marcelo hubiera sido una especie de Rudolph Giuliani mezclado con William J. Bratton, su destitución hubiera provocado protestas masivas que habrían dejado al nivel de pic-nic a la megamarcha contra la inseguridad del 27 de junio de 2004.

En realidad, que Ebrard deje su cargo es intrascendente, lo alarmante es la posición del gobierno ante los problemas del país. Esta obsesión por el ejercicio del poder jerárquico, por mandar, hace mucho daño a México. La administración de Fox, al igual que la de muchas instancias públicas y privadas del país, está llena de personas incompetentes pero disciplinadas. Malo es un gobierno que premia la estupidez obediente.

Cuando una organización recompensa la disciplina sobre la inteligencia únicamente se tienen resultados en función de los aciertos o errores de la cabeza en la línea de mando, la idea de un sólo cerebro con muchas manos no es la más estratégica en la compleja realidad contemporánea, aunque el modelo lo propusiera el mismo Mark Gruenwald.

Resulta claro que la obediencia es valiosa, siempre y cuando venga acompañada de capacidad y competencia, de lo contrario es sólo un pretexto para fortalecer los lazos autoritarios en los grupos políticos. De la misma manera, la insubordinación puede ser el mayor obstáculo para implementar políticas adecuadas y pertinentes. Lo que Fox hizo con Ebrard es dar un manotazo por cuestionar su sagrada autoridad, es un cese impulsado por el poder, no por la razón. Lo inteligente hubiera sido que el presidente lo hubiera destituido hace mucho tiempo, cuando se empezó a percibir que la seguridad pública en el DF no mejoraba, no ahora que se desafió, torpemente, la potestad constitucional de remover al encargado de esa área en la capital del país

Al resto de la nación no le va mejor que al DF. Enrique Salinas de Gortari pierde la vida en el Estado de México y Fox considera que su homicidio quizá no tenga una causa política. Un debate sobre este punto es bobo por definición: Resulta difícil definir que es más malo, que en México cada día haya más inseguridad y que no se requiera ser político para tener una muerte horrible o ser tan oligofrénico para suponer que los parientes de Salinas de Gortari necesariamente deben morir por motivos políticos. En Jalisco las policías se preocupan más por perseguir a las parejitas que se hacen arrumacos en la vía pública que por detener a los ladrones de autopartes o poner en cintura a los pandilleros. Bajo la perspectiva de lo peligrosa que se ha vuelto la vida en las ciudades de México, resulta irrelevante si a alguien lo matan por ser político, empresario, delincuente o simple ciudadano. ¿A quién le importa si un funcionario es insubordinado u obediente con su jefe, cuando tiene que padecer una administración que no lo protege de los delincuentes, a tribunales que no administran justicia (mucho menos lo hacen de forma expedita) o la vida en ciudades donde cada día hay más embotellamientos, más basura en las calles, más contaminación?

Quizá la parte más triste de esta visión autoritaria es que los mexicanos están hartos de la falta de resultados en el ámbito público y privado. El escaso crecimiento económico, la inseguridad pública, el desempleo y las políticas públicas de corte burocratizante han redundado en una disminución de la calidad de vida de todas las personas en este país.

Ojalá contáramos con más insubordinados en este país, no incompetentes como Ebrard, sino brillantes y valientes, decididos a decir “no, señor, se equivoca y su error es perjudicial para los demás”. Precisamente esa capacidad para repeler la estupidez es lo que nos hace humanos, ya lo decía Gilbert Keith Chesterton: “Algo muerto puede ser arrastrado por la corriente pero sólo las cosas vivas van en contra de ésta". Seamos menos autoritarios y más perspicaces, este país ha sufrido mucho para llegar a la democracia electoral, ya es tiempo de llevarlo al bienestar y al gobierno de la inteligencia, donde lo más importante no sea tener el poder, sino la razón.

viernes, diciembre 03, 2004

Chesterton y el sistema de partidos

The Party System was founded on one national notion of fair play. It was the notion that folly and futility should be fairly divided between both sides (El sistema de partidos fue fundado bajo una noción nacional de juego limpio. Fue la noción de que locura e inutilidad deberían ser justamente divididas entre ambos lados).

G.K. Chesterton [1924]

La presidencia de la necedad

La necedad es la madre de todos los males
Marco Tulio Cicerón


El presidente se inconforma por las modificaciones al Presupuesto que le hizo la Cámara de Diputados y presenta observaciones al decreto (o sea, veta la decisión de los legisladores) y la reacción no se hace esperar: La Mesa Directiva de la Cámara discutirá hasta el 7 de diciembre el documento de Fox, ya que considera que tiene una calidad jurídica indefinida. Dicho en buen español, no reconocieron las observaciones como veto, porque asumen que el Ejecutivo no tiene facultades para vetar el presupuesto. ¿Qué esperaba Fox de la Cámara? Resulta obvio que la mayoría de los diputados no son panistas y que el llamado bloque opositor no iba a dar trámite a algo que considera un absurdo constitucional.

Ahora Fox dice que le queda la posibilidad de ir a la Corte Suprema. Difícilmente se puede justificar la conducta del primer mandatario, ¿obtuvo algún beneficio del desgaste político de presentar un veto que evidentemente iba a ignorarse olímpicamente? No, su proceder se califica por lo que la Real Academia define como el actuar ignorante, que no sabe lo que podía o debía saber, que es imprudente o falto de razón, terco y porfiado en lo que hace: Es decir, necio. ¿La expresión es injusta con el presidente? Consideramos que no y procedemos a fundamentar nuestro dicho.

¿Sabía el presidente lo que iba a suceder? Si previó las consecuencias de su “veto”, lo racional hubiera sido utilizar otro mecanismo distinto a una presentación de observaciones a los diputados y evitarse así un desgaste innecesario. ¿El presidente ganó algo con su acción? ¿Quiere que la Corte defina que tiene facultades para vetar presupuestos y para ello necesita que la materia de la controversia sea un rechazo a su decisión? Vamos a suponer que fuera así, que Fox es un hábil jugador de ajedrez jurídico y quiere convertirse en el nuevo estratega de la jurisprudencia mexicana, una suerte de John Marshall mexicano, con botas y hebilla vaquera. Continuemos con la suposición, pensemos que el asunto cae en manos de un ministro sensible a la visión foxista de la realidad (por ejemplo el Dr. Cossío) y se elabora un proyecto de resolución que otorga al presidente facultades de vetar el presupuesto, en una interpretación extensiva de lo dispuesto por el inciso C del artículo 72 constitucional. ¿Fox lograría así que su proyecto de presupuesto prevaleciera? Al parecer no, porque su partido todavía carecería de mayoría en la cámara y los opositores no cuentan con dos terceras partes de los votos totales para lograr que se confirme el presupuesto modificado.

Los escenarios posibles irían desde que los opositores se cruzaran de brazos y no negociaran arreglos (en México no se puede aplicar el presupuesto del año anterior en caso de falta de acuerdo legislativo) para así poner en un estado de crisis a la presidencia, hasta que el bloque opositor se ubique como un negociador duro, que sabe que en sus manos está el destino de las cosas. Claro, siempre queda la posibilidad de que un ministro de la Corte proponga en la resolución (sin que sea materia de la controversia) “reglas adicionales” en caso de disenso legislativo no superado, como que el presidente decida la estructuración del presupuesto o establezca la aplicación del decreto aprobado del año anterior… y el Congreso sometería a juicio político a los ministros que aprobaran tal decisión, como lo autorizan los artículos 109 y 110 de la Constitución. El presidente sacó el garrote para negociar, en lugar de ceder en áreas de la agenda política que a los diputados podrían haber resultado atractivas, conducta del mandatario que fue imprudente, por decirlo de una manera suave.

El presidente tenía en sus manos una falta de los diputados, la Constitución ordena en la fracción IV del artículo 74 que la Cámara Baja apruebe el Presupuesto de Egresos de la Federación a más tardar el día 15 de noviembre, término que no cumplieron los legisladores. Si él hubiera acudido directamente a la Corte para pedir que se definiera el presupuesto a aplicar cuando la Cámara de Diputados no lo aprueba en tiempo y hubiera pedido que se aplicara el del año pasado, quizá habría pasado a la historia constitucional mexicana como un estadista notable, pero prefirió el camino de la confrontación. Si ahora pretende usar la vía judicial respecto al incumplimiento del plazo constitucional, estará a discusión si consintió la validez del presupuesto al no realizar observaciones de fondo a que fuera aprobado fuera de término.

Ésta historia, que parece escrita por Charles Baudelaire, recuerda una de sus inmortales frases: El más irreprochable de los vicios es hacer el mal por necedad. Ojalá todos los actores involucrados superen sus soberbias y así conjuren los peligros causados por la presidencia de la necedad, una que a dos años de terminar el sexenio no ha dado resultados satisfactorios y sí muchas decepciones.

viernes, noviembre 26, 2004

Bienvenidos al México bruto

«‘¿Quién mató al Comendador? ... Fuenteovejuna, señor.
¿Y quién es Fuenteovejuna?... -Oh, todos a una’»

Félix Lope de Vega Carpio



Los vecinos de San Juan Ixtayopan, delegación Tláhuac en el DF, lincharon el martes pasado a tres agentes de la Policía Federal Preventiva (PFP) que realizaban investigaciones sobre ventas de drogas. Los homicidas buscaron defender su conducta con un argumento que deja frío al más políticamente correcto: Los asesinaron porque no se identificaron. Si esa afirmación parece irracional, las consecuencias del hecho delictivo lo son más.

Los medios reportan cómo los habitantes de esa localidad se encontraban en la plaza del pueblo y reclamaban a los medios que “defendieran a los culpables”, que los policías no acreditaron su investidura, que mientras no les hagan caso, defenderían a cualquier precio a sus hijos. Incluso se indignan porque los califican de asesinos, una generalización injusta según ellos. Ellos se asumen como las víctimas de la torpeza gubernamental, que no dio respuesta a una solicitud de reforzar la vigilancia policíaca en las escuelas de la comunidad, amenazadas por los secuestros. La indignada señora sentenció, agorera: Si la autoridad no hace nada por combatir a la inseguridad, los habitantes de San Juan Ixtayopan se encargarán de que no se continúen robando a sus hijos. Los habitantes de Tláhuac defienden su “derecho delinquir”, a hacerse venganza por propia mano, que no justicia. Se equivocaron, pero es culpa de los demás, no de ellos. ¿Esa forma de pensar no hace recordar la de algunos políticos, gobernantes y líderes sociales?

Ahora, que la Procuraduría General de la República (PGR) atrajo la investigación del linchamiento, resulta que no existía denuncia alguna ante el Ministerio Público por el delito de robo o secuestro de dos menores de la escuela primaria Popol Vuh de Tláhuac, situación que alegaban los moradores de esa delegación. No denuncian, pero sí linchan y ahora esperan impunidad.

A la larga historia de violaciones al Estado de Derecho ahora se suman los linchadores de San Juan Ixtayopan, selecto grupo de delincuentes que van desde los humildes macheteros de San Salvador Atenco hasta los altos funcionarios que promueven recursos ilegales para entorpecer el cumplimiento de la norma. ¿Qué diferencia hay entre los asesinos de Tláhuac, René Bejarano embolsándose los dineros de Carlos Ahumada o el Presidente Fox amenazando con impugnar un presupuesto que no tiene derecho a vetar? ¿Se distinguen esos personajes del empleador que no respeta la jornada de trabajo, no paga horas extras o despide sin indemnización?

En los últimos tres años se han suscitado siete linchamientos escandalosos en el Distrito Federal. En alguna ocasión Andrés Manuel López Obrador defendió el proceder de los delincuentes y no faltan quienes defienden el “derecho tradicional” y las costumbres de esas masas violentas. ¿Veremos que la PGR investigue a todo San Juan Ixtayopan? ¿Existirá un juez valiente que dicte orden de aprehensión para una masa de asesinos? La AFI y la PGR realizaron un operativo en Tláhuac, pero es necesario que se castigue a toda la Fuenteovejuna que supone que la masa otorga impunidad al daño y a la violencia.

Quizá la parte más peligrosa de la conducta irrespetuosa al Estado de Derecho sea la doble moral y necedad de los violadores de la ley, atributos correlativos que hacen tan peligrosos su proceder: Infringen la norma porque asumen que existen unas reglas para calificar sus actos y otras distintas para evaluar a los demás, persisten en su acción porque tercamente creen tener la razón. El hijo más perverso del iusnaturalismo es la desobediencia recurrente de la ley aducida en razón de la supuesta injusticia de la norma que impone obligaciones.

Por ejemplo, ¿podrá existir una cultura de respeto a la norma si el mismo artículo 171 Bis del Código de Procedimientos Penales de Jalisco permite que un exconvicto tenga una carta de policía sin antecedentes penales? Supuestamente esto tutela derechos humanos, pero se traduce en la distorsión del Estado de Derecho: Imaginemos a un asaltante que pretende seguir teniendo la patria potestad de sus hijos. A pesar de que fuera un delincuente peligroso, recurrente, por el simple hecho de purgar su pena, sus antecedentes quedarían fuera del alcance de un tribunal civil, incluso una oficina de información pública municipal podría caer en la irresponsabilidad de negar el acceso a los antecedentes penales de ese individuo porque no es funcionario público, alegando que es información personalísima. ¿Tendrá el mismo valor los antecedentes delictivos que las preferencias religiosas, políticas o sexuales? Normas como la mencionada del Código de Procedimientos Penales hacen que sólo tengan antecedentes penales los prófugos de la ley o los que se encuentran en proceso de cumplir la pena dictada por el juez. En Jalisco, haber cometido delitos es considerado información personalísima ¡No estamos en una mejor situación que el Distrito Federal! Allá linchan policías, aquí se protegen asaltantes.

Bienvenidos al México bruto, donde cualquiera puede violar la ley, siempre y cuando lo haga en masa, tenga padrino, un cargo público, o se apoye en normas ridículas aprobadas por nuestros diputados. Ya murieron unos policías en cumplimiento del deber ¿Qué se necesita para que la norma jurídica empiece a ser respetada?

lunes, septiembre 13, 2004

Sobre dictadores y enanismo mental

Napoleón, ese enano perverso y genial, señalaba que lo imposible es el fantasma de los tímidos y el refugio de los cobardes. En esa simple frase se aprecia toda la vena autoritaria del pequeño dictador. Bajo su nefanda lógica, los autócratas no son tímidos porque cualquier acción es posible aunque toque la dignidad de las personas, además de que son valientes porque no se valen de pretextos para lograr lo que sea a cualquier precio.

Yo veo en la temeridad napoleónica los signos contrarios a su dicho: Los dictadores son cobardes, porque imponen su voluntad desde el poderío cuando en igualdad de circunstancias sus súbditos los molerían a palos y, por extraño que parezca, los abusivos son tímidos en la paridad. No tiene ningún mérito que desde el poder se exija lo imposible, no hay valor ni arrojo en usar la fuerza contra quien no puede defenderse.

Por eso Napoleón terminó gordo y envenenado en Santa Elena.

Es lo menos que se merecía.

martes, enero 20, 2004

Visite Nigeria en México

Una mujer otomí de Amealco, Querétaro, se embaraza sin estar casada y recibe como castigo público que las mujeres de su pueblo la golpeen y le unten una pasta a base de chiles en sus genitales. Si el salvajismo de estas personas es indignante, más lo es la respuesta que dio el presidente de la Comisión de Derechos Humanos de Querétaro al periódico Crónica, la cual reproduzco porque de su simple lectura se aprecia la calificativa que merece:

    «[…] Bernardo Romero, presidente de la Comisión de Derechos Humanos de Querétaro, pidió ayer a Crónica: "por favor ya no hablen del asunto" de la mujer que fuera lapidada "por adulterio", siguiendo los usos y costumbres de Amealco, Querétaro.
    El ombusdman reconoció que "evidentemente ustedes tienen derecho a su trabajo y a informar, pero no sobre el derecho a la intimidad de las personas" y que "lo que mejor hay que hacer ahora es guardar silencio" y pidió respeto para la gente del pueblo.
    Asimismo enfatizó que el hecho de que estas prácticas se hayan hecho públicas "fue una ofensa" para los implicados.
    De estas prácticas "ya teníamos conocimiento", dijo Romero y reiteró que "hace varios meses ya sabíamos del hecho, pero yo suplico discreción, porque, bueno, ellos tienen derecho".
    La publicación informó sobre "el castigo" público a Matilde cuando mujeres de Amealco la golpearon y le untaron una pasta a base de chiles en sus genitales.
    El defensor de los derechos humanos del estado comunicó que la gente de Amealco quiere que se guarde silencio sobre este vergonzoso suceso.
    Y se sumó: "… pues tenemos que guardar silencio, ese es su derecho".
    La gente del pueblo quiere salir de esta situación, "sin hacerlo público" dijo Romero y opinó que el hecho de que se pregunte insistentemente sobre este asunto, es ofensivo y por ello "quiero pedirles que guarden el respeto".
    La CDHQ no puede intervenir en el asunto, puesto que "la gente es la que decide si desean cambiar sus costumbres o no", dijo el ombudsman y explicó que la comisión sólo puede ayudar en la medida en que sólo "opina y asesora" .
    Indicó que están asesorando a la gente, a fin de hacerles saber su opinión sobre estas prácticas crueles y señaló que han sostenido estas reuniones varias veces, no sólo con el pueblo sino con las autoridades de la entidad.
    La sociedad de Amealco está participando, dijo el defensor, pero no explicó cómo es que se siguen aplicando los "castigos" que denigran a las personas.
    "Claro que se va a hacer algo, pues ya está la causa penal y las autoridades tienen que llevar el caso" dijo. Afirmó también que no es competencia de la comisión intervenir en el proceso.
    El ombusman hizo incapié en que se respetara el sentimiento de los involucrados y "Yo suplico discreción" reiteró.
    SIN COMPETENCIA. En la Comisión Nacional de Derechos Humanos, se informó ayer que esa institución no puede intervenir contra el "castigo" que imponen usos y costumbres a las mujeres adúlteras en Amealco Querétaro, porque la ley se lo prohibe.
    Miguel Ángel Paredes, Director de Información de la CNDH explicó las atribuciones de la misma:
    "Eso es competencia de la Comisión estatal", aunque agregó que ellos tampoco pueden intervenir en los "usos y costumbres", sólo pueden dar asesoría y pedir que se respete la intimidad de las personas del pueblo.
    Paredes reiteró que constitucionalmente está señalado lo que no pueden hacer y dónde pueden intervenir o no.
    Sólo lo hacen en caso de violación a los derechos humanos por parte de una autoridad federal.
    Y preguntó: ¿Hay una autoridad federal que haya violado derechos humanos?
    Ante la negativa, confirmó que entonces la CNDH no podrá intervenir.
    El funcionario remitió a la reportera ante la autoridad judicial, o al Ministerio Público para saber si en el caso de Amealco se cometió un delito al aplicar los usos y costumbres.
    Entonces la fiscalía debería investigar el caso, apuntó[…]»

El Ministerio Público ya recibió una denuncia por violación, pero habrá que esperar que el órgano de procuración de justicia no opte por la vía fácil de acobardarse. Para más muestras de la inteligencia que tienen los habitantes de este país, puede leerse esta entrevista de un brillante paisano de la mujer agredida .

Aquí debería aparecer un comentario ácido. Sólo quiero expresar que la situación me asquea casi tanto como me repugnan las autoridades de México que defienden usos y costumbres barbáricos como si fueran la norma suprema. No se necesita ir a Nigeria para presenciar abusos basados en la irracionalidad pura.

Conclusión, los derechos humanos no son para los indígenas o pueblerinos.

Es bueno saberlo.
Legalidad por analogía

Marcelo Ebrard, Secretario de Seguridad Pública del DF, expresó con claridad meridiana la lógica jurídica del mexicano:

    «[…] Al término de la reunión del gabinete de seguridad pública, dijo que el uso de las "esposas" no es ilegal, pues de hecho son utilizadas por la Policía Judicial, los elementos de la Policía Federal Preventiva (PFP) y de la propia Procuraduría General de la República (PGR). […]»

Es decir, según Ebrard lo que hace legal a algo no es que lo permita u ordene la ley, sino que los demás lo hagan. En pocas palabras, si los demás lo hacen, entonces es legal y nosotros también podemos hacerlo. ¿Interesa si la ley prohíbe el uso de esposas o permite su utilización? Al parecer, a don Marcelo eso le importa un bledo.

Vaya.

Y después se sorprenden de que en México las leyes sean letra muerta.

lunes, enero 19, 2004

Marta por la boca muere

Público-Milenio (que ahora tiene restricciones de acceso, sobre las que se hace una brillante reflexión en el Jameslog ) reproduce una declaración de Marta Sahagún que no tiene desperdicio:

    «[…] Respecto de lo dicho por Santiago Creel en el sentido de que los políticos que quieran llegar tienen que hacerlo por méritos propios y no por amiguismos o compadrazgos, Marta Sahagún dijo avalar esa postura, pero reviró:

    “Estoy de acuerdo con eso, pero también en que para tener un cargo de elección no tenga nada que ver el género. La apertura y la oportunidad tienen que ser por igual para hombres y mujeres con base justamente en sus capacidades”. […]»

Así es, lo que importa es la capacidad. Por tanto, doña Marta, absténgase de competir por cualquier cargo público.

Gracias.

viernes, enero 16, 2004

El país de las paradojas

Resulta absurdo que el encargado de Ingresos de la Secretaría de Hacienda haya trabajado de magistrado presidente del Tribunal Fiscal de la Federación (la instancia que se supone juzga la legalidad de los actos del fisco y enmienda sus abusos), pero resulta más ofensivo a la inteligencia que un individuo que debería entender perfectamente la ley haya dicho que el programa de censo fiscal incluirá visitas tanto a viviendas particulares como a negocios, y aquellos que se nieguen a colaborar con la autoridad serán obligados a proporcionar sus datos . ¿Cómo piensan obligarlos? ¿Con la fuerza pública? Ah, qué irónico es el fascismo cuando viene de hombres de leyes.

Mientras el abogado metido a recaudador anda amenazando con el uso de la Gestapo (aunque esta Geheime Staatspolizei no tiene nada de secreta) para sangrar a la gente a domicilio, los juristas al servicio de los particulares parecen sus aliados porque incluso sugieren que el INEGI auxilie a las autoridades fiscales en el registro, como ya se previó en la Ley de Ingresos . ¿No saben estos peritos jurídicos que las personas tienen el derecho a que no se utilicen sus datos en actividades distintas a las que motivaron que facilitaran su información?

Los abogados explican que el Artículo 42 del Código Fiscal de la Federación faculta a la autoridad fiscal para hacer visitas domiciliarias a los contribuyentes, pero que los recaudadores sólo pueden llevar acabo las visitas en donde se realiza la actividad que provoca los impuestos. Traducción al español: Hacienda no puede ir a molestarlos a su casa, ya que el artículo 16 de la Constitución General de la República (que está por encima de cualquier ley fiscal) señala que para interrumpir o entrar al domicilio de las personas se requiere que sea mediante una orden escrita de la autoridad competente que funde legalmente y motive el acto de molestia, porque eso es -una molestia- la conducta de ir a la casa de alguien a preguntarle sus datos para cobrarle impuestos. ¿Qué pensaría Fox de que fueran a visitar a su mamacita los herederos del Sheriff de Nottingham?

Si Hacienda pretende hacer frente a la exigencia del Congreso de que tuviera un mayor control del padrón de contribuyentes a fin de combatir la evasión, lo que debería hacer es ir a cobrarle a los mercanchinfles de tianguis en lugar de violarles sus derechos fundamentales a las personas. Habrá que presentar una queja en la Comisión Nacional de los Derechos Humanos.

Por cierto, Carlos I de Inglaterra fue declarado traidor y mandado a decapitar como consecuencia de la estúpida decisión de pretender elevar los impuestos. Luis XVI terminó de la misma manera como consecuencia de una revolución provocada por la misma idiota razón fiscal; y antes que ellos Juan Sin Tierra tuvo que aceptar la Carta Magna (que limitó su poder de manera relevante) por la molestia provocada por sus prácticas recaudatorias. Desafortunadamente, Fox y su equipo sólo leen Las Aventuras de Kalimán.

Allá ellos.

Ineptos analfabetas.
Simplonería cívica

¿No tiene usted originalidad y quiere escribir una historieta educativa sobre valores democráticos? No se preocupe, fusílese los conceptos de Hulk y Superman e incluso le redactarán una nota periodística.

¿Qué sentido tiene copiar cómics cuando hay en la realidad personajes tan plásticos como Elba Esther Gordillo, Santiago Creel o los magistrados del Tribunal Federal Electoral?

A ver si no se les ocurre hacer una Liga de la Democracia que combata a la Legión de los Mapaches o una Liga de Caballeros Incompetentes.

¿Por qué no contratan a Alan Moore? Quizá pueda escribirles la historia de un Consejo de Ineptos liderados por un mago cuya misión es lograr que nadie vaya a votar.

Inútiles.

jueves, enero 15, 2004

Simplonería cívica

¿No tiene usted originalidad y quiere escribir una historieta educativa sobre valores democráticos? No se preocupe, fusílese el concepto de Hulk y Superman e incluso le escribirán una nota periodística.

A ver si no se les ocurre hacer una Liga de la Democracia que combata a la Legión de los Mapaches.

No tiene sentido copiar cómics cuando hay en la realidad personajes tan plásticos como Elba Esther Gordillo.

Inútiles.

martes, enero 13, 2004

Cinismo legislativo

La declaración más desvergonzada del día le corresponde al diputado Trinidad Muñoz que considera que los legisladores locales deben analizar la posibilidad de aumentarse el sueldo para poder pagar la parte proporcional del Impuesto Sobre la Renta como los obliga la ley:

    «[…] "Hay una violación a la Ley Federal del Trabajo si a determinados niveles se les dedujera su impuesto, porque se le estaría tocando su percepción que está recibiendo actualmente" […]»

¿De donde sacó el diputado Muñoz que se violarían sus derechos si se les reducen sus percepciones cuando empiecen a pagar impuestos? ¿Desde cuándo los legisladores que reciben dieta deben ser tratados como asalariados? ¿Qué norma de la Ley Federal del Trabajo viola el que los diputados cumplan con ley y paguen impuestos como siempre debieron hacerlo?

Ahora resulta que los contribuyentes debemos pagar la morosidad fiscal de los diputados de Jalisco. ¿No nos salen ya demasiado onerosos como para que tengamos que gastar más en ellos?

Qué basura tan cara pagamos.

Y apesta igual que la gratuita.
Dos viñetas de la hegemonía de los nacos

Viñeta 1. Dos hombres se encuentran en la calle, el primero es blanco, barbado, usa saco de tweed gris oxford, suéter cuello de tortuga negro así como bean, pantalones y zapatos del mismo color; el segundo individuo es de piel morena, usa una chamarra bombacha color amarillo caca, camisa rosa, corbata tinta y pantalones negros. El segundo mira con burla al primero, quien sólo atina a verlo directamente a los ojos y levantar la ceja.

Viñeta 2. Un tipo de traje color gris medio, camisa perla y corbata plata lisa recibe la burla de otro sujeto en una oficina porque “las corbatas lisas sólo las usan los cerillos de supermercado”. El burlesco usa camisa naranja.

¿Es Guadalajara tierra de nacos o Giorgio Armani es un patán en estas localidades olvidadas de Dios?

Qué flojera de rancho.

domingo, enero 11, 2004

Too late, Mr. O'Neill

Paul O'Neill fue secretario del Tesoro de Estados Unidos hasta diciembre de 2002, cuando lo despideron como parte de una reestructuración del gabinete. Ahora O'Neill ataca a George W. Bush al declarar que el presidente buscaba la manera de invadir Irak desde que asumió el poder en enero de 2001, lo que pone en entredicho el argumento del mandatario estadounidense que sostenía como fundamento de la guerra contra Irak que Saddam Hussein tenía armas de destrucción masiva.

Los comentarios de O'Neill son parte de una campaña para promocionar el libro The Price of Loyalty (El precio de la lealtad) que escribió Ron Suskind, ex reportero del Wall Street Journal. El periodista sostiene que el ex secretario del Tesoro y otros funcionarios de la Casa Blanca le entregaron documentos que revelan los planes que el gobierno de Bush estudiaba (en los primeros tres meses de 2001) para derrocar a Saddam. Incluso Suskind dice que tiene un documento del Pentágono titulado Foreign suitors for Iraqi Oil Field Contracts (Aspirantes extranjeros a contratos petroleros iraquíes) que habla sobre contratistas de 40 países y señala cuáles estarían interesados en Irak.

Si es verdad lo que dice Paul O'Neill, sus declaraciones lo dejan más mal parado que antes de que rompiera el silencio. Su denuncia llega demasiado tarde, cuando ya perecieron miles, por lo que O'Neill sería tan responsable como Bush de esas muertes y de una guerra injusta.

Por otra parte, si lo que busca el ex secretario del Tesoro es hacerle la vida pesada a Bush, su filtración de documentos secretos no quita que Estados Unidos lograra su mayor crecimiento en 19 años, 8.2% en el tercer trimestre de 2003, principalmente impulsado por la inyección de dinero del gobierno (como el utilizado en la guerra contra Irak). Si como político O'Neill es basura, como estratega de asuntos económicos lo es más.

Ahora O'Neill dice a la CBS que para él "la idea de prevención, de que Estados Unidos tenga el derecho unilateral de hacer lo que quiera, es un salto demasiado grande".

No tiene vergüenza.

sábado, enero 10, 2004

Adiós al maestro

Norberto Bobbio falleció, su partida provoca profunda tristeza en aquellos que fuimos guiados por sus brillantes estudios jurídicos y políticos.

Descanse en paz el gran maestro.

Y pensar que hay tanto idiota que goza de cabal salud.

viernes, enero 09, 2004

El autor del medio taco

El Presidente Fox tiene una gran autoestima, como se aprecia de esta declaración que aparece en Público-Milenio :

    «[…] “Como lo prometimos en campaña, por tres años hemos trabajado duro para lograr que en los Estados Unidos exista un reconocimiento pleno para nuestros queridos paisanos en aquel país” […]»

Si el trabajo duro de Fox sólo alcanzó para que el Presidente de Estados Unidos ofreciera la ya denominada media enchilada, entonces lo más conveniente es que el mandatario mexicano guarde silencio.

Calladito se ve más bonito.

En serio.

jueves, enero 08, 2004

Perogrullo encuestador

El portal del diario ABC reporta los resultados de una encuesta preparada por Gallup previa a la reunión anual del World Economic Forum en Davos, Suiza. El estudio, realizado a través de 43 mil entrevistas en 51 países, sostiene que “medio mundo percibe que el planeta es hoy menos seguro y la próxima generación vivirá aún con menor seguridad”.
¡Qué novedad! ¿Cuánto les costó ese refrendo de lo obvio?
Mejor consíganse la espada del augurio.
El fino y sus outlets.

Parece que el ilustre Jairo Calixto Albarrán se convertirá en cliente de este weblog, el día de hoy escribió este elegante comentario en su columna de Público-Milenio :

    «[…] todo parece indicar que los canijos gringos aspiran a que los mexicanos que viajen a sus disneylándicos territorios sólo tengan permiso para estar cuando mucho tres días. ¡Tres días! Eso no puede ser, sobre todo si pensamos que 72 horas nunca serán suficientes para que un compatriota promedio, acostumbrado a acampar en los outlets, pueda irse de shopping a San Antonio […]»

¿Acampar en los outlets? ¿Jairo cree que ese es el tipo de gente que se va de shopping a San Antonio? ¡Qué naco es Calixto Albarrán! De seguro se roba las servilletas de los Sanborns.

miércoles, enero 07, 2004

Oops!...He did it again.

Jairo Calixto Albarrán es el ganador del premio a la columna más idiota del día (galardón que disputa todo el tiempo, pero que no había recibido porque no se había instaurado este reconocimiento a la estolidez escrita) por la tontera que escribió hoy en Público-Milenio :

    «[…] Pero hablando de este enojoso asunto aeropuertario, ¿no han sido muy excesivos los lamentos de aquellos que no han dejado de chillar por los controles de seguridad de Estados Unidos? Ya hasta quieren que intervenga Derechos Humanos. Es curioso, pero estos mismos quejosos son los mismos que nunca se han quejado por las humillaciones a las que se someten con todo gusto cada vez que van a renovar la visa a la embajada yanqui para poder irse de shopping. […]»

Ahora resulta que si alguien aguanta humillaciones en un lado las tiene que tolerar en todos, si esa es la lógica con la que Jairo cotidianamente procesa la información que edita en Milenio, pobre diario. El muy excesivo Calixto Albarrán espera que las personas no se lamenten ni chillen por el trato aeroportuario porque ellos se someten con todo gusto a vejaciones en la embajada estadounidense. ¿Quién le dijo a ese tarado que la gente que saca su visa recibe gratamente el trato deseñoso de las instancias diplomáticas y consulares de la Unión Americana? Claro, en su naca visión del universo, todo aquel mexicano que puede irse de shopping a Estados Unidos debería negarse esa posibilidad y solidarizarse con el resto de los compatriotas que verían satisfecha su envidia al percatarse de que los demás se fastidian como los pobres. ¡Qué consuelo más cretino!

Qué bueno que la gente se queja en la CHDH de los abusos que realizan las autoridades mexicanas, resulta obvio que los medios para defenderse de los malos tratos de los diplomáticos estadounideses son menos efectivos porque las autoridades de ese país pueden discrecionalmente negar visas a los quejosos que protesten por su conducta. Calixto Albarrán no entiende esto porque difícilmente distingue su pie derecho del izquierdo y su mano de la nariz.

A fin de cuentas, la volvió a hacer (regarla), como si fuera discípulo de Britney Spears. Lo peor de todo es que a Jairo Calixto Albarrán lo ponen en la página 2 de Público-Milenio. ¿No hay manera de que lo escondan en la sección de sociales?

martes, enero 06, 2004

El columnista que todavía está ahí

Todavía no le ponemos nombre al premio a la columna más idiota del día, pero esta presea se le otorga al bodrio que Marco Provencio perpetró hoy en Público-Milenio y del cual sólo comentaremos algunas perlas:



    «[…] Por lo pronto, el Estado mexicano moderno demuestra una vez más que gusta de irse de vacaciones a fines de año (y el resto también, dirían algunos). Argumentará que, aquí sí, los derechos de los trabajadores (y en especial los de los mandos superiores) son conquistas laborales irrenunciables (aunque el mundo ya no sea como el de antes y mucho de lo que sustentaba esos derechos haya dejado de estar ahí para continuar haciéndolo) […]»

De acuerdo al brillante Provencio, mucho de lo que sustentaba los derechos laborales ya no está ahí, el lugar a donde se fueron esos elementos de sustentación sólo lo sabe Provencio pero esa circunstancia no le quita lo tonto a su comentario. De acuerdo a la lógica del ex vocero de Zedillo (y de Hacienda), los fundamentos de las vacaciones laborales desaparecieron por lo que en su torcido sentido de la existencia debería ser válido también que hubiera jornadas de más de ocho horas, despareciera el aguinaldo, no se pagaran horas extras y se justificara que algunos empleadores actúen como señores feudales con sus siervos.

En realidad, lo que ya no está ahí es el cerebro de Provencio, se ha de haber quedado en alguno de los basureros utilizados en la administración zedillista.

El ilustre columnista también escribe de otras cosas igualmente absurdas, pero merecerán mi comentario hasta que me dé la gana de seguir leyendo sus idioteces.

lunes, enero 05, 2004

El reclamo del hijo de los hermanos lelos y la disculpa de un servidor

Un personaje de la vida alegre universitaria me reclamó que en mi programa de radio haya dicho que el Big Brother que controlaba el PRI durante el autoritarismo fue sustituido en el foxiato por los hermanos lelos: Roberto y Elba Esther. Hoy me enteré de la razón de su molestia: Es hijo putativo (e incestuoso) de la infernal pareja.

Perdón.

Ja,ja,ja,ja,ja,ja,ja,ja.

domingo, enero 04, 2004

¡Ahí, madre!

Jorge Castañeda es el ganador del Premio Elba Esther Gordillo a la declaración más desafortunada del día de hoy, por sus aportaciones a la construcción y desarrollo de una cultura nacional del autohalago, plasmadas en la siguiente afirmación de su autoría:

    "Siempre uno piensa que todo en la vida es relativo, que en el futuro hay un candidato presidencial ideal que es mejor que yo, pero comparado con los que hay, empiezo a pensar que soy mejor que ellos”.

Esta declaración que Castañeda hizo a Milenio-Diario contrasta con la opinión que tienen sobre su perfil algunos de sus compañeros del Grupo San Ángel, como José Agustín Ortiz Pinchetti, quien no lo considera un buen candidato a la Presidencia de la República.

A Jorge Castañeda, que es un espléndido intelectual, le convendría tomar una posición más humilde y no andar por la vida entonando el Himno de Gordolfo Gelatino. ¿Acaso Jorge querrá que Elba Esther haga el papel de Doña Naborita? Qué pena me dan.

viernes, enero 02, 2004

Barbies en riesgo

Hay países donde sí se respeta el derecho a la parodia. En Estados Unidos, una corte federal de apelaciones protegió el derecho del artista Thomas Forsythe a hacer fotografías de la muñecas Barbie amenazadas por utensilios de cocina y desnudas. Las imágenes que motivaron la controversia judicial se pueden consultar en Internet.

Mattel, la compañía titular de los derechos de la Barbie, había demandado a Forsythe (oriundo de Utah) ya que aducía que las fotos infringían sus derechos de autor y de marca comercial. El Tribunal protegió al artista en los términos de la Primera Enmienda de la Constitución de Estados Unidos, lo que implicó que se ratificara una sentencia que ya había sido favorable a Forsythe en 2001.

Vaya, Mattel debería dedicarse a hacer mejores muñecos de Batman (sus articulaciones son pocas y pésimas) en vez de demandar a artistas pervertidos.

jueves, enero 01, 2004

Jueces y principio de reciprocidad

El Portal de CNN en Español reporta que el juez brasileño Julier Sebastiao da Silva ordenó fotografiar y tomar huellas a todos los ciudadanos estadounidenses que ingresen a Brasil desde el 1 de enero. La causa de esta medida se encuentra en que el gobierno de Estados Unidos comenzó a verificar la identidad de los visitantes extranjeros (mediante fotos y huellas dactilares) que ingresan con una visa a la Unión Americana (las personas que entran en ese supuesto son alrededor de 24 millones). Este mecanismo para mejorar la seguridad estadounidense no se aplicará a los viajeros de 27 países que no requieren de visa de ingreso a territorio, situación que el juez planteó al señalar que "obviamente que los ciudadanos europeos y de otros países ricos no serán objeto del acto ultrajante, que será reservado a los nacionales de países pobres de América latina, Africa, Oriente Medio y Asia". Esta conducta del gobierno de EU hacia los amazónicos (entre otros) motivó que Brasil diera un trato semejante a los estadounidenses que ingresen al territorio de ese país sudamericano.

El asunto, decidido por el juez da Silva previa solicitud del Ministerio Público Federal brasileño, no se refiere únicamente al prinicipio de reciprocidad en las relaciones internacionales (columna vertebral de la disciplina) sino que también tiene que ver con el prinicipio de dignidad de las personas que consagra la Constitución de ese país. Esas violaciones a los derechos humanos no sólo comprenden las ya de por sí obvias, como que a visitantes (que se presumen inocentes de toda culpa) se les ficha como si hubieran cometido delitos y ese trato es discriminatorio porque se determina en virtud del lugar de origen del viajero, sino que también incluyen vulneraciones a derechos más sofisticados como el consistente en no interconectar bases de datos sin el permiso (evidentemente libre, no coaccionado) de quien facilitó sus datos: La fotografía y las huellas digitales de los dos dedos índice del viajero se usarán en principio para verificar la identidad del extranjero en una base de datos del Departamento de Estado, que es el ministerio que otorga las visas en EU, pero la base de datos no sólo será utilizada por los agentes de migración estadounidenses para esos fines, sino que será cruzada con información del FBI y otros organismos federales para detectar la entrada de personas con infracciones inmigratorias, así como antecedentes criminales o terroristas. Resulta claro que toda persona en Occidente que tenga sentido común (no hay muchos) debe considerar apropiado que se evite que terroristas o delincuentes extranjeros ingresen a nuestros países, pero reducir a el universo de sospechosos a aquellos que requieren visa para entrar a EU es sostener que el terrorismo es un asunto de raza. Por lo que no extraña que el juez brasileño haya señalado que el requisito exigido por el gobierno estadounidense es un hecho "totalmente brutal, que amenaza los derechos humanos, viola la dignidad humana, xenófobo y digno de los peores horrores cometidos por los nazis".

Ojalá los órganos de procuración y administración de justicia mexicanos fueran tan responsables, valientes, dignos y eficientes como lo demostraron en este caso el Ministerio Público Federal brasileño y el juez da Silva. Lástima, aquí en México sólo tenemos Tribunales, como el Federal Electoral, que dan pena ajena.